En el hogar:
- Antes de comenzar el año escolar, hable a sus hijos con entusiasmo sobre la escuela. Recuerde que para los niños usted un modelo a seguir y si demuestra un actitud positiva hacia la educación su ánimo y disposición podrían ser contagiosos.
- Organicen un horario diario para crear hábitos de estudio. Separe al menos 60 minutos al día de domingo a jueves para estudiar y repasar el material escolar. Prepare los proyectos y trabajos especiales con tiempo. Verifique que las tareas y asignaciones estén bien contestadas. Prepare repaso para exámenes y pruebas cortas. Cuando no haya tarea, pueden leer cuentos, novelas o el periódico y discutir la lectura en familia.
- Enséñele a responsabilizarse de su labor escolar. En la medida en que su hijo vea cuán responsable es usted como padre o madre, así lo será él con sus tareas como estudiante. Recuerde, revise las tareas de sus hijos, pero no las haga usted.
- Analice el desempeño de su hijo mientras estudia. Si nota que pasa trabajo para leer, escribir, realizar un ejercicio matemático o comprender una lectura, podría tener algún problema de aprendizaje. Comuníquese con el consejero escolar o el trabajador social de la escuela y solicite ayuda.
- Conversen sobre lo que ocurren en la escuela durante las clases, los recesos y el almuerzo. La comunicación entre padres e hijos es el mayor lazo de unión familiar.
- Prepare un calendario mensual con las actividades escolares. Incluya los días de exámenes, pruebas, proyectos, informes, talleres para padres, días para visitar los maestros, actividades especiales de la escuela, entrega de notas, etc.
- Controle y supervise el celular, los programas de televisión, los video-juegos y el acceso a Internet de sus hijos. Si bien es cierto que las nuevas tecnologías nos ayudan a mantenernos al día con la globalización y que hacen que nuestros niños y adolescentes disfruten a la vez que aprenden, también es cierto que los padres deben vigilar y supervisar lo que ven y escuchan sus hijos, a quién conocen y qué datos personales comparten. La Internet y la Red Mundial pueden ser verdaderamente peligrosas cuando no se tiene control sobre las mismas.
- Conozca las amistades de su hijo y a sus padres. Principalmente en sus años de escuela intermedia y superior. Es normal que los adolescentes busquen identificarse con un grupo o ser aceptado por aquellos con los que se identifica. Manténgase alerta sobre qué hace cuando está con sus amigos o cuando los visita.
- Conversen sobre cómo enfrentar situaciones difíciles. Háblele sobre situaciones peligrosas o inapropiadas que podría enfrentar y cómo encararlas. Enséñele a aprender a decir “no” ante situaciones peligrosas o destructivas y a resistir la presión para desobedecer las reglas que no vaya de acuerdo a los valores de su familia.
- Examine y evalúe las actividades extracurriculares de su hijo. Las actividades extracurriculares son un buen recurso para que los niños hagan buen uso de su tiempo libre al mismo tiempo que fortalecen su autoestima, y le ayudan en el desarrollo de muchas destrezas y conocimientos. El exceso de actividades extraescolares en los niños podría provocar estrés, dolores de cabeza, dificultad para dormir, falta de apetito, incapacidad para controlar emociones, frustración, cansancio crónico, bajo rendimiento escolar, entre otros síntomas.
- Si su niño no vive con usted, llámele al menos 2 veces por semana y converse con él sobre la escuela. Si su hijo pasa con usted los fines de semana, haga que revise las tareas para el lunes y verifique que las complete. Ayúdele a estudiar. Manténgase informado de su desempeño académico.
En la escuela:
- Viste la escuela. Todos los maestros tenemos un periodo de visitas para que los padres asistan a nuestro salón a dar seguimiento al desempeño académico de sus hijos. Mantenga contacto con los maestros durante todo el año. Si usted es empleado del gobierno, la Orden Ejecutiva OE-1997-11 del 1 de abril de 1997, concede a los(as) servidores(as) públicos(as), “sin reducción de su paga, o de sus balances de licencias, dos (2) horas laborables al principio y al final de cada semestre escolar, cuando…comparezcan a las instituciones educativas donde cursan estudios sus hijos.”
- Ofrézcase como voluntario. Son muchas las labores necesarias para que una escuela funcione a su 100%. Los maestros y el personal de apoyo al estudiante a veces nos vemos limitados en las actividades que programamos para nuestros alumnos por que no tenemos ayuda ni apoyo de los padres y madres para poder realizarlas. Agraciadamente, nuestro plantel cuenta con un grupo de “Madres Voluntarias” que año tras año dan la milla extra, no sólo por sus hijos si no por todos nuestros estudiantes. Dato curioso que la matrícula de nuestra escuela es de 522 alumnos y sólo contamos con 5 voluntarias. Siempre son necesarias “las manos amigas”.
- Participe de las actividades y talleres que realiza la escuela. Los niños se sienten importantes cuando papá y mamá van a la escuela a compartir con ellos. Nuestra escuela ofrece talleres a padres y madres durante todo el año sobre diversos temas.
Recuerde que su hogar es y siempre será la primera escuela que tuvo su hijo; su ejemplo de una paternidad o una maternidad responsable le servirá de modelo toda la vida.
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